Ismael Sambrano R. / Capítulo Argentina DHSF.
Al conmemorarse el 75 aniversario de la declaración universal de los DDHH, el rey de Marruecos, en mensaje a un simposio internacional sobre estos derechos ha reafirmado, desde el más alto nivel, el compromiso de este país con los derechos humanos.
En américa latina y durante años, escuchamos a los enemigos de Marruecos decir que esta era una monarquía retrograda, que violaba los derechos humanos, que las mujeres no tenían derechos ni acceso a cargos de poder y que era un país invasor del Sahara. Lo anterior se complementaba, como era en nuestro, con denuncias de que los representantes civiles de marruecos defendían las dictaduras militares de Pinochet en Chile y de Videla en Argentina, lo que constituía, con ese solo dato, que personalidades y prestigiadas organizaciones de los DDHH, como madres y abuelas de plaza de mayo, además del premio nobel de las paz, Alfonso Pérez Esquivel, tomaran distancia y le ofrecieran tribuna, contactos y cobertura al frente Polisario que, sin contrapeso, repetía su discurso
Fue hace 5 años que, en reunión con abuelas y por primera vez, escuchamos al chileno Juan Moraga decir que esto era absolutamente al revés, que era el Polisario quien violaba los DDHH, que las víctimas eran los propios saharauis, que en los últimos 20 años Marruecos no solo había reivindicado todos los derechos de las mujeres, país donde ahora ocupaban cargos en el parlamento, el estado, embajadas y organismos sociales, superando ampliamente la representación femenina de nuestros países; que sobre el conflicto del Sahara Marruecos había hecho una propuesta de autonomía regional que es un verdadero ejemplo de solución pacífica de conflictos. Todas estas afirmaciones, acompañadas de documentos que, por primera vez, nos abrieron los ojos sobre lo que realmente ocurre en el Sahara, marcó un antes y después en nuestra mirada sobre el Sahara. Cuando Hebe preguntó sobre el rol de los defensores de dictadores que apoyaban a Marruecos, la respuesta de Moraga fue categórica, diciendo que a los mejor es así, porque el apoyo a Marruecos es transversal y que, junto a los que defienden a las dictaduras, también hay quienes han sido víctimas de estas, en nuestro caso, “en Chile, hay muchas víctimas de Pinochet que apoyan la propuesta de Marruecos para el Sahara, empezando por familiares directos del ex presidente Allende”.
Este proceso de verdades sobre el Sahara y el Polisario tiene su punto culmine durante el III foro mundial de los DDHH efectuado a comienzos de año en Buenos Aires, ocasión en que el polisario fue excluido a causa de que sus dirigentes se encuentran investigados en tribunales internacionales por la violación de DDHH. En contra parte y en el ex centro de tortura ESMA donde Derechos humanos sin fronteras había sido seleccionado para ocupar un salón y allí debatir sobre DDHH en zonas de conflicto, ex miembros del Polisario exponían con detalles sobre las violaciones a los DDHH y delitos que comete a diario la cúpula de este grupo.
Ahora el rey de Marruecos, al conmemorar un nuevo aniversario de la declaración universal de los DDHH ha vuelto a ratificar su compromiso y sin dobles lecturas, con estos derechos, donde, en parte de su discurso dice:
“El compromiso del Reino de Marruecos con la promoción de los derechos humanos en el ámbito nacional, no sólo se ha limitado a su consagración constitucional, sino que se ha convertido en un pilar de las políticas públicas y un importante elemento determinante de sus opciones estratégicas, incluidas las económicas, sociales, culturales y ambientales. Nuestro firme compromiso con la defensa y consagración de estos derechos, sólo puede ser igualado por nuestro sólido empeño de continuar arraigando y fortaleciendo el estado de derecho y consolidación de las instituciones, en tanto que opción voluntarista y soberana, fortaleciendo el equilibrio de estos logros, paralelamente con la interacción continua y positiva con las cuestiones emergentes de derechos humanos, tanto a nivel nacional como dentro del sistema internacional de derechos humanos”.
Refiriéndose a los compromisos internacionales en esta materia el rey de Marruecos afirma: “tomando como base las disposiciones de la Declaración Universal de Derechos Humanos, la comunidad internacional ha conseguido elaborar acuerdos y protocolos, algunos vinculantes y otros no, en un esfuerzo por encontrar un terreno común universal que impida la reproducción de las tragedias bélicas y discordias, así como de las distintas formas de agresión y desplazamientos. Sin embargo, toda solución a los actuales desafíos transfronterizos, no podrá ser implementada sobre el terreno sin una contribución efectiva de los países del Sur en la formulación de unas concepciones consistentes en la implementación de los principios previstos en la Declaración Universal de Derechos Humanos, los artículos de los dos Pactos Internacionales, o los acuerdos internacionales en la materia, a fin de llevar a la práctica los derechos y proponer las mejores prácticas susceptibles de conducir a soluciones creativas para garantizar la efectividad de los derechos humanos. He aquí lo que el Reino de Marruecos sigue reafirmando en el seno de lo que defiende y propone, ya sea en el marco de sus esfuerzos por resolver los conflictos o por renovar las vías de cooperación y solidaridad, con el fin de restablecer la seguridad, la paz y la estabilidad”.
Las afirmaciones categóricas del rey de marruecos sobre derechos humanos han terminado por sepultar las mentiras y desinformación esparcidas durante años por el polisario en nuestro continente demostrando, también que al final del camino la verdad termina imponiéndose. La referencia del rey sobre “lo que falta por hacer en esta materia”, es también un indicador de su sensibilidad y compromiso con la defensa de estos derechos donde quiera sean violados. Desde América latina y en lo que modestamente podamos aportar, siguiendo el ejemplo de nuestras madres y abuelas de plaza de mayo y sin temor a descalificaciones, podemos decir que compartimos plenamente la forma y el fondo de esta intervención, de un hombre que, desde el más alto cargo del reino, no se olvida de los más humiles, destaca el rol de las organizaciones sociales y pone el acento en la defensa de los derechos de las personas que, en su país, tiene rango constitucional. Sin duda, el mejor saludo en el día internacional de los derechos humanos.