Dr. Mario H. Concha Vergara, Vicepresidente de ONG Rehabilitación y Esperanza (RYE).
La ONG Rehabilitación y Esperanza (RYE) viene denunciando desde hace años el problema del alcoholismo y de la droga en Chile; lamentablemente ha habido oídos sordos y ojos invidentes respecto a estas lacras de nuestra sociedad.
Entre las indicaciones que existen de personas ajenas, por lo general a las realidades del país tenemos que como respuesta a SENDA (Servicio Nacional Para la Prevención y Rehabilitación del Consumo de Drogas y Alcohol) que cree haber descubierto América al informar que 36 personas mueren diariamente en este país a causa del alcoholismo.
Hace años le hemos informado a la opinión pública y al mismo SENDA que en Chile somos los primeros en América en alcoholismo adolescente y adulto, así como hemos informado que hay una estrecha relación detrás de los delitos violentos entre estos y las adicciones. En el ámbito cultural nacional tenemos, por ejemplo que cada 10 presos 8 son hijos de presos de diversos delitos; en otras palabras, la disfunción del hogar produce más delitos y la droga es vendida por el micro tráfico de familias enteras en donde podemos apreciar que incluso abuelitas setentonas se encargan de la venta y distribución de droga.
Según las estadísticas de RYE, uno de cada tres niños ya consume alcohol y drogas y que esto es así por la falta de preocupación de las autoridades. Al respecto, nosotros casi sin recursos hemos, a lo largo del país, llevado a cabo Seminarios para instruir a los propios adictos, a sus allegados y a personas de la sociedad interesadas en combatir estos flagelos. Hemos tenido bastante éxito pero, es solo una brizna en el pajar pues a pesar de que hemos logrado sacar a muchas personas de la droga y del alcoholismo, nuestros recursos no dan para más y, sin embargo, el SENDA que recibe varios miles de millones anuales como presupuesto no es capaz de garantizar éxito en su supuesta lucha contra las adicciones. En un año el SENDA recibe más dinero que lo que recauda don Francisco en su Teletón.
El alcohol es culpable del 36,46% de los decesos por causas cardiovasculares, 4,21% por cáncer; 13,% por enfermedades digestivas, 9,8% por Problemas perinatales. 21,73% de Lesiones no Intencionales, 4,75% por Lesiones Intencionales. Y así otra serie de decesos producto de esta enfermedad del alcoholismo. Según el propio SENDA el costo del consumo del alcohol y sus consecuencias en Chile es del orden de US.$ 2,3 mil millones de dólares.
La respuesta a esto lo dan investigadores que desde los escritorios ven al mundo en forma virtual, olvidándose que hay que ir a terreno a capacitar a las gentes y hacerse cargo de sus problemas instalando casas de rehabilitación y enseñanza.
Estos investigadores, desde una perspectiva miope plantean que para reducir el alcoholismo en el país hay que elevar los precios (esto me recuerda un poco la ley antialcohólica en tiempos de Al Capone y Lucky Luciano). Los investigadores se olvidan que haciendo esto más difícil llevarán a los mafiosos y desalmados a crear métodos de falsificación del alcohol lo cual a la larga matará a más gentes que el alcohol normal y legítimo. Dicen además que hay que regular la publicidad para que los individuos no consuman; esto es como decir, si tienen calor tapen el sol con un dedo. También plantean la disponibilidad del alcohol; es decir vuelven a tiempos de los mafiosos de los años 20 en EE.UU.
Por otra parte, las soluciones ofrecidas crearán más problemas sociales pues ellas significan que muchas personas perderían sus empleos; que bajarían las exportaciones de nuestros alcoholes lo que significaría la pérdida de ingresos en moneda dura desfinanciando nuestra balanza de pagos y disminuyendo el PIB, entre otros problemas económicos como por ejemplo la fabricación de envases ad-hoc, de preservativos, de corchos, transporte, etcétera. En otras palabras, al parecer nuestros sabios no han pensado en el valor agregado que producen los productos alcohólicos. El problema pasa por uno cultural que es el cambio de mentalidad de los enfermos y la sociedad.
¿Qué es lo que busca RYE? Se busca la reinserción social de las personas cambiándoles sus hábitos a través de la capacitación de dirigentes que vivan y convivan en su entorno natural que ayuden como monitores, trabajo que hemos venido haciendo a bajo nivel pues no contamos con el apoyo económico necesario a pesar de que nuestros docentes, profesionales todos, no cobran pero que tienen que trasladarse a distintos lugares y que deben comprar los materiales necesarios para sus charlas, cursos y talleres.
La formación de monitores ayudará a mejorar a través de la información, la calidad de vida de mujeres y hombres que en su mayoría viven en condiciones de marginalidad y que además, desconfían de ciertas autoridades que aparecen en los barrios y poblaciones acompañados de policías para conversar sobre estos problemas.
El Alcohol y la Droga Matan a la Familia es un Proyecto que llevamos adelante con el fin de ayudar a los alcohólicos y drogadictos que son víctimas, también, de cómo los ve la sociedad. Ellos son enfermos a quienes hay que darles un trato solidario y estas enfermedades deben ser tratadas como un tema de Estado y no como un mero problema social que crea otros problemas sociales.