Autor: Sebastián Vedoya M.
El 11 de abril se cumplió una nueva conmemoración del fallecimiento de la niña de 11 años. Este viernes la fiscalía presentó acusación contra cuatro personas.
El 11 de abril se cumplieron tres años desde el fallecimiento de Lissette Villa (11) al interior del Cread Galvarino del Sename. Una conmemoración que coincide con los últimos pasos de la investigación penal a cargo del fiscal Marcos Emilfork, quien este viernes presentó acusación en contra de cuatro funcionarios del servicio por eventuales apremios ilegítimos que le costaron la vida a la menor.
Sin embargo, el deceso de la niña no solo derivó en la búsqueda de responsables, también se instaló en el país la necesidad de abordar la infancia vulnerable. Para Patricia Muñoz, defensora de la Niñez, “con la muerte de Lissette se constató la realidad que los niños venían enfrentando desde hace a lo menos 40 años”.
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Unicef cuestiona control preventivo a partir de los 14 años y asegura que «contraviene» la Convención sobre los Derechos del Niño y «otros tratados suscritos por Chile».
Este 11 de abril, la directora nacional del Sename, Susana Tonda, recordó a los funcionarios la muerte de Lissette, considerado “un día para reflexionar”: “Ese día marca un antes y un después no solo para el Sename, sino que también para el país entero que se remeció con la muerte (…) Esta crisis nos impuso a todos grandes responsabilidades que nos obligan a trabajar con sentido de urgencia, ya que tras la vida de Lissette hay miles de niños que han sido gravemente vulnerados”.
La subsecretaria de la Niñez, Carol Bown, reconoce que el hecho “hizo que se tomaran acciones mucho más concretas sobre el problema que enfrentaba la infancia vulnerada. Generó una visibilización para no olvidar nunca más el tema”. Bown destacó la voluntad política transversal que ha logrado este tema, aunque asume que no dependerá de un solo gobierno o sector: “Tenemos una deuda histórica y lograr las soluciones no es de la noche a la mañana”.
Gabriel Guzmán, de Fundación para la Confianza, indicó que pese a las medidas impulsadas por los últimos gobiernos, “hoy no tenemos un sistema que garantice, en la práctica, la protección y el cumplimiento de los derechos de niños y niñas”.