Con la exhibición de videos, lectura de mensajes y saludos que llegaron de distintas partes del mundo, además de aprobar declaraciones de condena a violaciones de derechos humanos “bajo gobiernos o grupos paramilitares de izquierda y derecha”, culminó en Santiago el II encuentro internacional de defensoras y defensores de los DDHH.
El encuentro, convocado por Derechos Humanos Sin fronteras contó con la participación de delegados de 7 países que inician sus actividades con un acto en la biblioteca nacional de Chile donde, con la presencia de diplomáticos y especialmente dirigentes sociales y defensores de estos derechos, hizo uso de la palabra la embajadora de palestina, Vera Baboun; el presidente de la confederación de trabajadores del Ecuador, Edgar Sarango y el creador de esta fundación, Juan Carlos Moraga.
Junto con designar comisiones para elaborar declaraciones de condena a Israel por la violación de los DDHH en contra del pueblo palestino; la violación de estos derechos por parte de gobiernos de derecha en El Salvador, Perú, la amazonía ecuatoriana y también por Venezuela y Nicaragua, la directora jurídica de esta fundación Erika Botero, dio lectura a la presentación de un voto sobre la violación de los derechos humanos en el norte de Africa que en parte dice:
“Durante años, Derechos Humanos Sin Fronteras (DHSF) ha tejido una alianza con la Asociación Saharaui para la Defensa de los Derechos Humanos para unir fuerzas en la lucha por la justicia. Hemos sido testigos de la sombra que el Frente Polisario ha proyectado sobre su pueblo, a través de pruebas y testimonios que hemos obtenido, como ecos de un grito silenciado. Constatamos que una parte del Pueblo Saharaui, originario del desierto, vive atrapado en los Campamentos de Tinduf, territorio de Argelia, sin el bien más preciado del ser humano, la libertad. En 2023, los líderes del Polisario, como actores de una tragedia griega, admitieron sus actos, reconociendo crímenes y violaciones a los derechos humanos que habían cometido. Esta confesión, un eco de la verdad en medio del ruido del conflicto, no puede ser ignorada. En respuesta a esta realidad ineludible, el II Encuentro Internacional de Defensoras y Defensores de los Derechos Humanos, celebrado en Santiago de Chile, ha decidido levantar su voz en un coro unánime, aprobando la siguiente declaración”.
El documento, aprobado por el 98% de los asistentes, teniendo una sola abstención de 38 delegados con derecho a voto dice:
“Con lo que respecta al Norte de África hacemos una breve radiografía de la situación que se vive en materia de DDHH en esta Región donde constatamos que Marruecos, como país, está culminando un proceso pacífico de transición en materia de derechos humanos, proceso que comienza constituyendo la Instancia de Equidad y Reconciliación (IER), entidad que ha tenido como fin reparar e indemnizar a las víctimas de las detenciones arbitrarias cometidas durante lo que se conoce como los años de plomo. La IER culminó su trabajo de reparación e indemnización a las víctimas para dar paso a la creación del Consejo Nacional de DDHH, cuyo objetivo es velar por el respeto de los derechos humanos en todo el país y su seguimiento”. Y sigue:
“En lo que respecta a la República de Argelia, constatamos que este país sigue inmerso en su pasado sin reparar a ninguna víctima, además, en los últimos años, con la detención y condenas muy duras contra periodistas, activistas de redes sociales, defensores de los derechos humanos y opositores políticos, ha terminado por constituirse en un régimen represor que controlan y dirigen militares que se han alejado absolutamente del proyecto original que consolida la independencia de este país con el Frente de liberación nacional como vanguardia del proceso de liberación. “Este proceso, que se inicia con una propuesta de liberación nacional no solo ha sido traicionado, sino que ha terminado convirtiéndose en un régimen militar muy parecido a las dictaduras que hemos conocido en América Latina”.
Y sobre el Polisario la declaración dice:
“En lo que respecta al Polisario, organización armada que tiene a la mitad de su cúpula dirigente investigada por la justicia internacional por graves violaciones de derechos humanos, sigue actuando como grupo paramilitar, manteniendo cautiva a la población saharaui que vive en condiciones inhumanas en los campamentos instalados en las cercanías de la ciudad argelina de Tindouf”.
La contundente declaración, aprobada por dirigentes sociales, sindicales y de los DDHH provenientes de todo el continente americano, en su inmensa mayoría de izquierda, concluye
“En conclusión, y a la luz de antecedentes conocidos y comprobados, consideramos que el frente Polisario es una factor de inestabilidad de toda la Región del Norte de áfrica y tanto este grupo como Argelia, deben escuchar llamamientos de la comunidad internacional para la solución de un conflicto claramente artificial, acogiendo la propuesta de autonomía regional para el Sahara presentada por Marruecos en Naciones Unidas, que otorga a los saharauis autonomía política, económica, administrativa y judicial en su territorio, cuestión valorada y apoyada por la inmensa mayoría de países del mundo y recientemente por la Internacional socialista, de la cual también hemos recibido antecedentes confirmando denuncias y propuestas”.
El evento culmino la tarde del sábado santiaguino en medio de intercambio de direcciones y el compromiso de unir fuerzas en defensa de los derechos donde quiera estos sean violados porque, como dijo el presidente de la Confederación de Trabajadores del Ecuador, “los derechos humanos son violados por gobierno de izquierda y derecha”.